Carmen fue abandonada a las puertas de nuestro refugio, encerrada en una pequeña jaula junto a dos podencos adultos, Juancho y Maripi, y tres cachorros más: Toñi, Paca y Pepe. Por su aspecto, suponemos que son el papá, la mamá y los cuatro peques que forman esta adorable familia de podencos.
Carmen, como buena cachorra que es, tiene el típico carácter: es una perrita muy activa e inquieta que necesita tiempo para jugar. Es amorosa, feliz, cariñosa, activa, curiosa, mimosa y juguetona. Le encanta estar con los humanos y recibir mimos.
Carmen busca un hogar donde sepan que adoptar un cachorro es un acto de responsabilidad y un compromiso para toda la vida. Adoptar un cachorro significa enamorarse al instante de su ternura y felicidad, pero también armarse de paciencia para darle la educación que necesitan desde pequeños y guiarlos en su camino hasta convertirse en un perro adulto, maravilloso y equilibrado.
Carmen y sus hermanos son muy felices con nosotros, pero un refugio no es el lugar ideal para que un cachorro crezca, ellas se merecen un hogar. Si estás dispuesto a darle todo el cariño, la paciencia y la educación que necesita, no lo dudes más. ¡Adopta a Carmen! Para más información escribe a adopcionesesp@gmail.com