Queca llegó a nuestro refugio desde Fuengirola. Esta preciosa podenca se encontraba vagando sola y abandonada en mitad del campo. Por suerte, poco a poco se fue acercando a una finca en la que le ponían agua y comida, consiguiendo ganarse su confianza hasta que la pudieron poner a salvo y nos pidieron ayuda.
En el escaso tiempo que lleva con nosotros, Queca se muestra aún miedosa, tímida y reservada con los desconocidos. Desde su introducción en patio con el resto de sus compañeros perrunos, ha comenzado a mostrarse más cercana y curiosa, por lo que estamos seguros de que, a pesar de su timidez inicial, con un poco de tiempo y el apoyo de nuestros voluntarios, nuestra chica conseguirá sentirse más segura y ganar confianza.
Queca tiene juventud, nobleza y el potencial de convertirse en un una compañera excepcional, leal y amorosa para aquella familia que esté dispuesta a brindarle paciencia, comprensión y el entorno adecuado para que ella se sienta verdaderamente cómoda. Si quieres darle una oportunidad, escríbenos a adopcionesesp@gmail.com