Salli es uno de los 8 cachorros que ha llegado al refugio con su mamá Malta. Recatados de la calle en un pueblo de Córdoba, vivían en una zanja entre unas ruedas y todos ellos venían en muy malas condiciones. Pero todo eso se acabó para ellos y por suerte crecerán sin saber lo que es el maltrato.
Aún son demasiado pequeños para saber qué tipo de carácter van a tener. Por ahora son como todos los cachorros: activos, inquietos, curiosos, juguetones y dormilones. La familia que adopte a alguno de ellos debe tener claro que conforme vayan creciendo van a ir siendo más traviesos, y posiblemente rompan algo en casa. Por lo tanto, van a necesitar que les enseñen unas normas básicas como pasear con correa, hacer sus necesidades en la calle, etc.
Si estáis dispuestos a darle todo el cariño, la paciencia y la educación que necesita, no lo dudes más. ¡Adopta a Salli!
Para más información escribe a adopcionesesp@gmail.com