Kairi llegó al refugio cedida por su anterior dueño, llega de una vida de encierro y trabajo, de una vida, que no es vivir. Vino junto a sus compañeras Bloom, Athena, Cari, Hama, Gali, Iluka y Ula.
Es una chica prudente al principio, algo normal, debido al trato recibido durante 7 años, por el ser humano.
Pero poco a poco está aprendiendo a confiar, una vez más, nuestros voluntarios, están haciendo un excelente trabajo con ella, le están enseñando a recibir mimos y a entender, que hay manos, que cuidan y protegen. Con sus compañeros perrunos, convive genial, ellos le están ayudando a ganar confianza, le están ayudando a ser una perrita feliz. Además es APTA con gatos.
Kairi merece encontrar su hogar, su lugar en el mundo, si crees que puede formar parte de tu familia, si estás dispuesto a darle la oportunidad, escríbenos adopcionesesp@gmail.com