Slayer llegó a nosotros desde un pueblo de la provincia de Sevilla, nos lo entregaron junto con otros 3 galgos: Sabaton, Opeth y Tool.
Slayer es un perro muy amigable, equilibrado y bien adaptado a la vida del refugio. Le encantan los humanos, que lo acaricien y recibir atención.
Se lleva bien con todos los demás perros y también se le han realizado la prueba con gatos y se considera que se lleva bien con ellos, aunque, como siempre, recomendamos tener cuidado al llegar a un hogar e introducir un perro a un gato.
Slayer será una gran incorporación a cualquier familia. ¿Te convertirás en su familia?